miércoles, 10 de abril de 2013

CUBANOS Y PUNTO por YOANI SANCHEZ





CUBANOS Y PUNTO por YOANI SANCHEZ
CUBANOS Y PUNTOPor Yoani SanchezHace unos años, cuando salí por primera vez de Cuba , estaba yo en un tren que partía desde la ciudad de Berlín hacia el Norte. Un Berlín ya reunificado, pero que todavía conservaba fragmentos de esa fea cicatriz que fue aquel muro que dividió a una nación. En el compartimento de aquel tren y mientras recordaba a mi padre y mi abuelo ferroviarios, que hubieran dado cualquier cosa por viajar en esa maravilla de vagones y locomotora, entablé una conversación con un joven que iba sentado justo frente a mí. Después del primer intercambio de saludos, de maltratar el idioma alemán con un “Guten Tag” y aclarar que “Ich spreche ein bisschen Deutsch”, el hombre me preguntó inmediatamente de dónde yo venía. Así que le respondí con un “Ich komme aus Kuba”.

Como siempre ocurre después de la frase de que uno viene de la mayor de las Antillas, el interlocutor trató de demostrar lo mucho que sabía sobre nuestro país. Normalmente, durante ese viaje me encontraba con gente que me decía “ah… Cuba , sí, Varadero, ron, música salsa”. También hallé hasta un par de casos que la única referencia que parecían tener sobre nuestra nación era el disco “Buena Vista Social Club”, que justamente por esos años estaba arrasando en popularidad en las listas de temas más escuchados. Pero aquel joven en un tren de Berlín me sorprendió.

A diferencia de otros no me respondió con un estereotipo turístico o melódico, llegó más allá. Su pregunta fue: “¿Eres de Cuba ? ¿De la Cuba de Fidel o de la Cuba de Miami?

Mi rostro se puso rojo, se me olvidó todo la poca lengua germana que sabía y le respondí en mi mejor español de Centro Habana: “ Chico , yo soy cubana de José Martí”. Ahí terminó nuestra breve conversación.

No obstante, el resto de viaje y el resto de mi vida, he tenido muy presente aquella charla. Me he preguntado muchas veces qué ha llevado a aquel berlinés y a tantas otras personas en el mundo a ver a los cubanos de dentro y de fuera de la Isla como dos mundos separados, dos mundos irreconciliables.

La respuesta a esa pregunta recorre también parte del trabajo en mi blog Generación Y. ¿Cómo fue que dividieron nuestra nación? ¿Cómo fue que un gobierno, un partido, un hombre en el poder, se atribuyeron el derecho de decidir quién debía llevar nuestra nacionalidad y quién no? La respuesta a esas preguntas la saben ustedes mucho mejor que yo. Ustedes, que han vivido el dolor del exilio, que partieron la mayoría de las veces sólo con lo que llevaban puesto. Ustedes, que dijeron adiós a familiares, a muchos de los cuales nunca más volvieron a ver. Ustedes que han tratado de preservar a Cuba, la única, la indivisible, la completa, en vuestras mentes y vuestros corazones.

Pero yo sigo preguntándome ¿Qué pasó? ¿Cómo fue que el gentilicio de cubano pasó a ser algo que sólo se otorgaba por considerandos ideológicos? Créanme que cuando uno ha nacido y crecido con una sola versión de la historia, una versión mutilada y conveniente de la historia, no puede responderse esa pregunta. Por suerte, del adoctrinamiento siempre es posible despertar. Basta que cada día una pregunta, cómo ácido corrosivo, se nos adentre en la cabeza. Basta que no nos conformemos con lo que nos dijeron. El adoctrinamiento es incompatible con la duda, el lavado de cerebro termina justo cuando ese mismo cerebro empieza a cuestionarse las frases que le han dicho. El proceso de despertar es lento, comienza como un extrañamiento, como si de pronto le vieras las costuras a la realidad.

Así fue como se inició todo en mi caso. Fui una pionerita adocenada, todos ustedes lo saben. Repetí cada día en los matutinos de la escuela primaria aquella consigna de “Pioneros por el comunismo, seremos como el Che”. Corrí infinidad de veces con la máscara antigás bajo el brazo hacia un refugio, mientras mis maestros me aseguraban que pronto seríamos atacados desde algún lugar. Lo creí. Un niño siempre cree lo que le dicen los mayores. Pero había algunas cosas que no encajaban. Todo proceso de búsqueda de la verdad tiene su detonante. Justo un momento en que una pieza no encaja, en que algo no tiene lógica. Y esa ausencia de lógica estaba fuera de la escuela, estaba en mi barrio y en mi casa.

Yo no entendía bien el por qué si aquellos que se habían ido en el Mariel eran “enemigos de la Patria”, por qué mis amigas estaban tan felices cuando alguno de aquellos parientes exiliados les enviaba algo de comida o de ropa. ¿Por qué esos vecinos que habían sido despedido con un acto de repudio en el solar de Cayo Hueso donde yo había nacido, eran los que mantenían a la madre anciana que había quedado atrás, quien regalaba parte de aquellos paquetes a los mismos que habían lanzado huevos e insultos a sus hijos? Yo no entendía. Y de esa incomprensión, dolorosa como todo parto, nació la persona que soy ahora.

Por eso, cuando aquel berlinés que nunca había estado en Cuba intentó dividir mi nación, salté como un gato y lo encaré. Por eso, estoy aquí ante ustedes hoy, tratando de ayudar a que nadie, nunca más, pueda dividirnos entre un tipo de cubano u otro. Los vamos a necesitar para la Cuba futura y los necesitamos en la Cuba presente. Sin ustedes nuestro país estaría incompleto, como alguien a quien se le ha amputado sus extremidades. No podemos permitir que nos sigan dividiendo. Como mismo estamos luchando para que habitar un país donde se permitan los derechos a la expresión, la asociación y tantos otros que nos han arrebatados; tenemos que hacer todo -lo posible y lo imposible- porque ustedes recuperen esos derechos que también les han sido quitados. Es que no hay un ustedes y un nosotros… solo hay un “nosotros”. No permitamos que nos sigan separando.

Aquí estoy porque no me creía la historia que me contaron. Como muchos otros tantos cubanos que crecieron bajo una sola “verdad” oficial, hemos despertado. Tenemos que reconstruir nuestra nación. Nosotros solos no podemos. Los aquí presentes -y bien que lo saben- han ayudado a muchas familias de la Isla a poner un plato de comida sobre la mesa de sus hijos. Se han abierto camino en sociedades donde tuvieron que empezar desde cero. Han llevado y cuidado a Cuba . Ayúdennos a unificarla, a derrumbar ese muro que. a diferencia del de Berlin , no es de concreto ni ladrillos, sino de mentiras, silencios, malas intenciones.

En esa Cuba con la que muchos soñamos no hará falta aclarar qué tipo de cubano uno es. Seremos cubanos a secas, cubanos y punto, cubanos.

[Texto leído en acto realizado en la Torre de la Libertad, Miami, Florida, el 1° de abril de 2013




domingo, 7 de abril de 2013

Capitol Hill Cubans: Must-Watch: What Beyonce and Kathy Castor Will Not See in Cuba

Capitol Hill Cubans: Must-Watch: What Beyonce and Kathy Castor Will Not See in Cuba

viernes, 8 de marzo de 2013

NUESTRAS VOCES

NUESTRAS VOCES

jueves, 7 de marzo de 2013

LA MUERTE DE HUGO CHÁVEZ FRÍAS NO CAMBIARÁ LOS PLANES DE LOS HERMANOS CASTRO, NI EL DESTINO DE VENEZUELA.


LA MUERTE DE HUGO CHÁVEZ FRÍAS NO CAMBIARÁ LOS PLANES DE LOS HERMANOS CASTRO, NI EL DESTINO DE VENEZUELA.


 
Es extraordinario que  los presidentes  a nivel mundial hagan un despliegue de confraternidad con los dictadores, violadores a los derechos humanos y  golpistas, después que mueren. Al morir Chávez, vemos el circo de todos los presidentes acudiendo a sus funerales como payasos en las fiestas.

Los venezolanos no aprenden, y desgraciadamente todo seguirá igual con Chávez o sin él. Ojalá me equivoque y la oposición tome el poder si se convocan las elecciones, pero hay un factor importantísimo que regirá sobre Venezuela, y es que Cuba no se dejará quitar el Welfare que esta nación les otorga. Cuba desde que los Castro tomaron el poder, siempre se ha sustentado con  las ayudas ajenas y Venezuela es la clave para sustentar la economía cubana.

Siento decirle a los venezolanos que si no actúan con firmeza, han perdido a Venezuela como los cubanos perdimos a Cuba. Mírense en ese espejo y vean los resultados.

Actúen y no digan que  no son como los cubanos, porque lamentablemente tengo que decirles que son iguales  que nosotros. Desgraciadamente tanto Venezuela como Cuba han sido olvidadas por los Presidentes y las organizaciones mundiales entre ellas la de los Derechos Humanos y todos se dan las manos y beben de la misma copa.
 
 El cinismo de la organización de los Derechos Humanos no tuvo limites. Un minuto de silencio guardado para un dictador, ladrón, golpista con muchos muertos sobre sus espaldas, abusador de su pueblo y violador de los derechos humanos, y todavía le rinden tributo. Si asco dio Chávez en vida, mas asco dan los  presidentes circenses acudiendo a sus funerales y todas esas organizaciones mundiales que envían las condolencias en vez de felicitar al pueblo oprimido de Venezuela. El circo está en todo su esplendor y Bolívar debe estar revolcado en su tumba.
Ojalá Chávez desde el mas allá  recuerde que  los Castro fueron su mejores amigos y colaboradores de la miseria venezolana y sienta la necesidad de tenerlos con el cómo sus mentores y buenos  amigos de siempre.

martes, 19 de febrero de 2013

ARTICULO DE GUILLERMO DESCAZI EN ELNUEVO HERALD


 

ARTICULO DE GUILLERMO DESCAZI  EN ELNUEVO  HERALD
 
 
 Periodista que siempre he admirado por su forma tan intelectual al escribir desglosando los temas eficazmente, haciendo que sus lectores  se eduquen con sus artículos.
 
No dejen de leerlo.
 
 
Con el final  del articulo difiero un poco
 
Muy bueno el artículo, pero la final de este no creo que Dios los esté bendiciendo ni al Papa que renuncia, ni al que viene... hasta que la Iglesia Católica sea reformada por un nuevo Papa que tenga la sotana bien puesta.
1- Que no fabriquen mas santos, que Dios es muy celoso(palabras en la biblia)
2- Que terminen con el celibato, ya que este fue impuesto por un Papa que odiaba a las mujeres (lo dice la historia).
3-Que expulsen de las filas del Vaticano a todos los sacerdotes pederastas que mancillan el prestigio de los  decentes.
 Hasta que todas esas suciedades no terminen en el Vaticano, no habrá renovación en los feligreses que cada día se convierten a otras religiones cansados de tantos escándalos en la "Santa Sede",  aunque históricamente sabemos que esos escándalos han perdurado por los siglos amén. Es bochornoso que el Cardenal Mahony quiera votar como tal para elegir al nuevo Papa después de haber sido cómplice de los sacerdotes pederastas que no expulsó de las filas de la Iglesia  si no que los trasladaba de parroquias. Un verdadero bochorno dentro de la Iglesia católica que sus feligreses permiten y por carácter transitivo, serán cómplices también si no levantan sus voces para que todo esto cambie.

sábado, 26 de enero de 2013

Respuesta al artículo "Los Plagios" de Esteban Fernández



Posted: 26 Jan 2013 12:25 AM PST
A mi buzón electrónico llegan diariamente artículos de diferentes temas, fotografías, chistes religiosos, cadenas etc., como a todos los que estamos en las redes informáticas electrónicas actualmente.
Es muy difícil reconocer si un tema ha sido plagiado o no, porque si no se conoce el artículo y su autor, no hay maneras de descubrirlo, a menos que seamos detectives dedicados a esos asuntos. Me llegó el artículo del Sr. Esteban Fernández titulado "Los Plagios".
Después de leerlo, tengo que responderle al Sr. Esteban que estoy de acuerdo que plagiar una obra es un delito y que se sienta molesto porque sus trabajos hayan sido plagiados lo entiendo, pero es imposible que todos conozcamos la procedencia de lo que nos llega al buzón de la internet. Los usuarios no somos analistas literarios, ni detectives, o espías buscando quienes son los que se toman la libertad de plagiar los artículos. Ese es el riesgo de este medio, igual que los que estamos en facebook cualquier día pueden usar nuestras fotos y hacerle algún montaje que nos perjudique.
Cuando el tema es bueno, positivo, y lleva algo de inspiración a la comunidad, se pasa sin saber a quién pertenece. Al Sr. Esteban pueden conocerlo muchos, y esto es debido a la Internet también, pero la comunidad cubana lo conoce debido al periódico 20 de Mayo.
Los lectores no podemos andar con la lupa para conocer de quien es el artículo y si lo han plagiado no, por lo tanto, lo pasamos sin saber si afectamos al autor y esto seguirá así mientras exista este medio y el autor no lo aclare. Parece que el Sr. Fernández lleva la estadística de que es el más plagiado, algo que no creo, porque muchos se quejaron y se quejan de lo mismo.
Como el caso del Sr. DR. LUIS AGUILAR LEÓN con su artículo "Los cubanos y el Profeta". http://www.alexlib.com/LuisAguilarLeon/2000-06-24.htm
Considero que los interesados en proteger sus artículos serían los escritores no los lectores. Muchos conocen que en Washington D.C se registran hasta las ideas, protegiendo con el copyright los derechos de autor. Yo me pregunto ¿Cuál es la satisfacción del que escribe? ¡Que lo lean y que lo conozcan! En eso usted tiene razón, pero ¿Qué culpa tenemos los que lo recibimos alterado sin su nombre y sin saber a quién pertenece y el artículo vale la pena leerlo y hacerle forward? Cuando nos llega un artículo suyo con su foto así lo pasamos, pero si viene sin su foto y sin su nombre ¿Cómo lo adivinamos si no trae sus datos? Nadie de los que leemos por la internet los e-mails, tenemos tiempo de andar buscando quien es el autor de tal o cual escrito si ya llega modificado, o no nos interesa perder nuestro tiempo en eso. La internet es más un medio de entretención que de estudio y análisis. Para el estudio están los Colegios y Universidades. Escriba su dirección electrónica e-mail, su fotografía, y hágalo en PDF sus artículos y verá que no podrán ser plagiados fácilmente. La honestidad del ser humano siempre estará en la balanza de la imperfección y los lectores no somos trabajadores sociales para rectificar esos asuntos, eso le compete a usted y a los que conozcan que esos escritos son suyos. Como escritor proteger sus artículos es su prioridad, pero si se los copian o roban siéntase feliz porque usted no es el único, y porque sus artículos le están dando la vuelta al mundo y si conoce al que lo está perjudicando entable una demanda judicial para que no lo vuelva a hacer, porque el derecho de autor es suyo.
Nosotros como lectores pasamos lo que leemos si vale la pena, porque si no lo borramos. Aunque por mucho que lo registre el que se los va a plagiar lo hace hasta que lo descubran, pero lo único que no podemos los lectores es cohibirnos de enviarlo porque no sabemos quién es el autor. No somos adivinos y no debe responsabilizarnos a los que lo recibimos como vengan, porque no somos trabajadores de protección al copyright y desconocemos quien es el autor que muchas veces no aparece en Google, Wikipedia o Snopes por poner algunos ejemplos, y le ratifico que para que sepan que es de usted, debe poner su correo electrónico como hacen los periodistas de los distintos periódicos que leemos sus artículos en la internet, y que gracias a este medio usted está siendo más conocido aún. Usted está también como la gatita de María Ramos que tira la piedra y esconde la mano (palabras suyas) porque no desea que le critiquen, o elogien, y no tener nada que ver con el público y no se identifica plenamente. Cuando un escritor escribe algo debe brindarle la oportunidad al lector de que le reclame, o le aclare cualquier aspecto, eso se llama responsabilidad, y esa es suya, no nuestra. No todos los usuarios hacen búsquedas por la Internet porque no tienen ni el tiempo, ni le dan importancia a los artículos, si no conocen el autor o de donde procede, y así está el 90 % de lo que reciben informaciones electrónicas. Las personas honestas decimos "esto no lo sabemos así lo recibí y así lo paso y si alguien sabe la fuente que me lo notifiquen" o algo parecido, es todo lo que podemos hacer, pero no podemos cuidarle el derecho de autor sin conocer tales artículos plagiados, cambiados, o adjudicados a otros. Nadie nos puede coartar el derecho de pasar lo que uno considere que debe hacerlo este plagiado o no, porque no somos detectives, ni tan inteligentes como usted para saber cuando algo esta alterado, o plagiado, aunque no conozcamos al autor, porque esto es lo que usted está reclamando. Después que los usuarios conocemos quien es el autor y lo hemos leído de la fuente original, y nos llega alterado, estamos en el ineludible deber de borrarlo. Siéntase dichoso que si paso el suyo en lo que respecta a mí, es porque me gustó, porque cuando algo no me gusta no lo paso, ni conociendo al autor, como sucedió con su artículo "el excusado de oro" que lo consideré totalmente inaceptable, motivando que le enviara una carta al 20 de mayo haciéndole ver su gran error. Tocante a su disertación acerca del anonimato, usted dice en su artículo: cuando la persona recibe un escrito anónimo no debe hacerlo “forward” porque desde niños aprendimos que a los anónimos no les debemos hacer caso. Permítame informarle Sr. Esteban que en USA, existe en el College el anonimato, cuando nos entregan una forma y "anónimamente" hay que decir como ha sido la clase, y la profesora, algo que siempre me he negado, porque cubana al fin, no me gustan los anonimatos, y si tengo que decir algo lo digo claramente y de frente, pero esa era la regla. Cada país tiene su propia cultura que hay que respetar.
Esto lo escribió usted en el articulo "los plagios". "muchos me han dicho: “oh, eso ya lo leí antes, el autor es otro conocido periodista, chico no debes copiarle a nadie”. Si los que dialogan personalmente con usted no conocen la procedencia de sus artículos ¿Cómo usted quiere Sr. Fernández que todos los que recibimos estos correos le conozcamos?
Usted escribió este comentario en su artículo acerca de una persona que le dijo: “olvídate de eso, lo importante es que se lean y que rueden tus escritos”. Bueno, si ese fuera mi gusto entonces yo escribiría anónimamente.
Le señalo que su principal error es que sí está escribiendo parcialmente "anónimamente" porque es muy fácil mover el texto y su foto y debe hacerlo o por un PDF para conservarlo lo mejor posible aunque nada de esto vale a la hora de que un inescrupuloso se lo adjudique a él o a otros. ¿Pero se imaginaria usted que cada persona que recibe un artículo le pregunte primero al que se lo envió ¿quién es el autor, cuando se escribió, donde se publicó por primera vez, quién se lo envió, para poder hacerle forward? Ni usted mismo se lo cree. Por Dios Sr. Esteban Tómelo con filosofía y pídale a sus primeros contactos de donde sale el artículo, que cuando lo reciban, no muevan ni su foto, ni sus palabras, ni se lo adjudiquen a otros para que no nos responsabilice a los que los pasamos sin sus datos, ¡Razone!
alilabar@yahoo.com

 

 

 


 

sábado, 12 de enero de 2013

ARROZ CON TRES LECHES


       Siempre he declarado que no soy buena cocinera ni repostera. No me gusta la cocina, pero eso no implica que tengo que alimentar a la familia y trato de hacerlo rápido y lo mejor posible.

       El día 31 de diciembre fuimos a comer a un restaurante Italiano y de postre pedimos helados y arroz con leche. Por supuesto que aunque estoy en dieta para toda la vida comí de todo y gané unas libras, las que estoy tratando de bajar. Cuando probé el arroz con leche por discreción no dije nada pero mi hija frente a mí se empezó a reír y me dijo -mami el tuyo es una delicia.

       Buscando en la internet hay cientos de recetas y creo que la mía es la más sabrosa (Nadie me dijo que usara las tres leches) lo hice de idea porque me encanta el pastel de tres leches), quizás exista esta receta. El haber vivido en un país comunista me ha dado la sabiduría de apreciar la comida y no botarla por gusto.

       Mi arroz con leche comienza en el refrigerador aunque no lo crean, y termina ahí. Cuando cocino arroz blanco en la olla eléctrica trato de no ponerle aceite ni ningún tipo de grasa y como cocino muy bajo de sal lo que queda de ese día en la olla lo  hago un paquetico y lo congelo. Así en varios días tengo un montón de  ellos de arroz blanco cocinado y precisamente no es el arroz de bola o los que muchos llaman el grano redondo, si no el que uso frecuentemente que es el largo de grano fino.

       El segundo proceso es que los descongelo poniendo todos los poquitos de arroz que he reunido en una olla grande con agua caliente y lo enjuago con agua fría. Lo cuelo, y de inmediato lo paso a un caldero grande de hierro. Como nunca mido nada, si no que lo hago como decía la abuela "a ojo de buen cubero" que en definitiva nunca he sabido claramente el significado exacto, pero lo traduzco "como me da la gana".

Dependiendo de la cantidad de arroz le añado leche de vaca con dos ramas de canela o una grande, y lo pongo a cocinar a fuego mediano sin taparlo (no me gustan los regueros imprevistos). Cuando hierve a borbotones  le bajo el fuego  a lento lo más posible para que no se pegue ni tenga que estar frente al caldero. Le añado una lata de leche evaporada y dos cucharadas de vainilla y una lata de leche condensada y lo dejo que siga cocinando a fuego lento y solo muevo una o dos veces en el proceso. Lo pruebo y (a mi no me gustan los dulces tan dulces valga la redundancia pero a mi familia sí.

Le agrego una taza de azúcar blanca y lo dejo hervir a fuego lento hasta que todo el líquido se consuma y quede cremoso sin exceso de leche y por supuesto siempre destapado. 
Cuando ya lo retiro del fuego lo muevo bien.Lo sirvo caliente en unas copitas chiquitas que tengo y las dejo que se enfríe un poco y las paso al refrigerador tapadas cada copa con una bolsita de nylon de las que se usan para guardar los bocaditos (sándwiches).

No le agrego canela en polvo como hacia mi madre después de servidas porque no les gusta a los míos en esa forma. Ese arroz con leche es delicioso, y el taparlo no deja que el grano se endurezca o se reseque en el frio. A mí me ha dado un resultado fantástico. Háganlo y luego me dicen. En esta receta no les puedo ofrecer la medida acuérdense que lo hago a "ojo de buen cubero" pero sigan las indicaciones y el resultado es maravilloso. Si alguien sabe el significado de  ese dicho que me lo informe por favor.

No coman mucho para que no engorden.