El hecho de que no crea en la Vírgen de la Caridad del Cobre (ni en ninguna) no me exime de felicitar a todos los cubanos que dentro de la Isla están dando un paso al frente dentro de cualquier religión, en este caso la Católica. No voy a entrar en comentarios negativos por mi parte por la falta de fe o creencia religiosa, ni en las críticas que me asaltan a borbotones y callo acerca de los eclesiásticos del Vaticano y el trato con los hermanos Castro. Cerrando mi pobre entendimiento en este caso para no herir susceptibilidades. El hecho es que han conseguido dar un ¡Viva la Virgen! ¡Viva Cuba! sin tener que decir Viva la Revolución o Viva Fidel Castro, y eso alivia a todos esos feligreses que ya están cansados de los mismos cuentos durante más de 5 décadas. No estoy de acuerdo si fuera "religiosa" que se junte la religión con símbolos patrióticos. Ya estuviera dialogando con el Cardenal Ortega acerca de eso, (y seguramente despedida de la congregación).
La Biblia rechaza los símbolos patrióticos y las idolatrías a santos, vírgenes, etc. Dios es celoso. Pero si eso es parte del acuerdo seguirá apareciendo la Virgen de la Caridad del Cobre acompañada de la bandera cubana, y muchas veces llamada la "mambisa" para completar el cuadro patriótico, y no religioso.
Hay que elogiar los logros de los sacerdotes católicos y otros de diferentes religiones, porque han logrado que muchos seguidores empiecen un proceso de cambio psicológico, y eso es bueno, porque en vez de centrar su fe en una Revolución fracasada, y en sus no menos fracasados líderes, tienen la esperanza que brindan las religiones "Tiempos mejores" y eso es promesa de Dios para los que creen, pero no a corto plazo.
Eso les beneficia de cierta manera, pero esto sucederá hasta que Raúl Castro se canse del trato con el secretario de Estado de la Santa Sede, Tarcisio Bertone y tome el control absoluto de la situación. A los dictadores no les gusta que su pueblo no los adoren, y esa contraposición será frenada si se implanta en Cuba un sistema como el Chino. Aperturas cuando le conviene al régimen, y fusilamientos cuando alguien les critique o trabajen para cambios radicales. Esperemos que lo del Tibet no se repita. Ojalá para beneficio del pueblo cubano en la Isla, que no vuelvan a meter a la Virgen de la Caridad del Cobre en el closet y esta pueda brindarles a ese pueblo carente de todo, un poco de fe religiosa al sacarla en procesiones por las calles de la Isla, buscando la fe y la esperanza que le robaron al pueblo desde el triunfo de la Revolución.
A.B
Créditos: al que hizo el video y a J.L. que me lo envió por E-mail